El lanzador de Texas aseguró que se sometió a un plan de
entrenamiento para subir las millas por hora de su envío rápido
Martín Pérez siente que se encuentra justo donde quería
estar, cuando los Rangers le informaron que recibiría la oportunidad de ganarse
un puesto en la rotación del equipo.
"Estoy en excelentes condiciones", aseguró por
teléfono, mientras esperaba en el aeropuerto de Dallas-Fort Worth el vuelo que
lo llevaría a Phoenix, donde esta tarde se medirá a los Diamantes.
"La recta se encuentra muy por encima de las 92-93
millas por hora que promedió el año pasado y ha llegado hasta 97 mph. Estoy muy
satisfecho con la manera como me he preparado".
Pérez, que comenzó el año como el tercer mejor prospecto de
Texas y el 81 de todo el beisbol, tuvo que ir a la lista de incapacitados el 4
de marzo, tras ser golpeado por una línea que le fracturó el antebrazo izquierdo.
El incidente obstaculizó los planes de los texanos con el promisorio lanzador.
"Fue un proceso difícil", admitió. "Nunca
antes había pasado por algo así en mi carrera. Pero lo asumí con mucha madurez
y fortaleza mental. Desde el momento en el que acepté el reto de la
rehabilitación me enfoqué en regresar mucho mejor de lo que estaba antes. El
acondicionamiento fue muy importante".
Texas decidió ponerlo en el primer partido de una doble
jornada que se llevará a cabo en el Chase Field, por encima de Ross Wolf y Josh
Lindblom, luego de que el zurdo lanzara 7 innings en blanco contra el Reno, en
la Liga de la Costa del Pacífico, el lunes.
Pérez apenas necesitó 77 envíos para completar su labor,
aisló 3 hits, ponchó a 7 y no concedió boletos. En cuatro salidas de ligas
menores, incluidas 2 de rehabilitación, promedia 1,4 boletos por cada 9
innings, la mitad de su registro vitalicio. Si puede tener ese control, su
repertorio secundario lucirá mucho mejor.
"Controlé el tiempo del juego. Cuando eso pasa siempre
estoy encima de los bateadores. Atacando la zona. Es lo que pienso hacer (hoy).
Ese partido fue contra la filial de Arizona. Espero hacer lo mismo en las mayores",
enfatizó.
Pérez no tiene garantías de quedarse arriba, cualquiera sea
el resultado, y el reto no será fácil. Nunca se ha enfrentado a los Diamantes,
uno de los equipos que anota más carreras en la Liga Nacional, en un parque que
favorece a los toleteros.
"Sólo voy a tratar de hacer mi trabajo, de ir a más de
5 entradas. Sin pensar en que me pueden bajar. No tengo miedo de competir.
Nunca lo he tenido. Sólo quiero agradecer a Texas la oportunidad".
Esta nota apareció
publicada en el diario El Nacional el 27 de mayo de 2013
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