Foto BRYAN GREEN |
El veloz prospecto de los Bravos de Atlanta transita el
camino indicado para ascender a las mayores en poco tiempo. El segunda base lidera las menores en hits
Cuando finalice la temporada regular de ligas menores, el
nombre de José Peraza aparecerá entre los venezolanos más destacados de 2014 y
no sería descabellado otorgarle el título del mejor bateador.
El prospecto de los Bravos inició el fin de semana con 156
imparables, la mayor cantidad en todo el sistema de granjas de las grandes
ligas. Su ritmo con el madero solo puede ser comparado con el de su compatriota
José Altuve, la figura de los Astros de Houston que lideraba las mayores con
158 imparables hasta el viernes.
“No he cambiado muchas cosas desde que comencé la temporada.
Solo hice un ajuste cuando me subieron (al Mississippi de la Liga del Sur, doble A). Me
dijeron que dejara las manos un poco atrás y creo que eso ha dado resultados.
El resto ha sido mantener las mismas rutinas de trabajo”, señaló el infielder
de Atlanta, al otro lado del teléfono.
Un talento especial
Peraza, de 20 años de edad, comenzó la
campaña con el Lynchburg (A+) y cuando fue promovido lideraba la Liga de Carolina con .342 de promedio.
En sus primeros 17 encuentros con su nuevo equipo, ligó .342/.375/.474, pero el
coach de bateo John Moses y el manager Aaron Holbert notaron que su swing era
un poco lento cuando debía reaccionar a envíos rápidos, así que le pidieron
llevar las manos un poco más cerca del hombro derecho en lugar de dejarlas al
frente de su esternón, con el bate casi vertical, como solía hacerlo antes de
cada pitcheo. El ajuste fue mínimo pero le ha ayudado.
“Sabíamos la clase de pelotero que era”, dijo Holbert a MiLB.com.
“Tuvimos la oportunidad de verlo en los entrenamientos. Básicamente, trabajó
con el equipo doble A durante la primavera y estuvo muy cerca de quedarse, pero
la organización decidió que era mejor enviarlo a un nivel más bajo. Con el paso
de los partidos, los números dejaron claro su talento. Es bueno tenerlo aquí.
Ha sido una gran adición para nosotros y está demostrando el valor que tiene”.
Al concluir julio, Peraza superaba a Altuve 152 inatrapables
por 151.
“Ha estado muy bien”, destacó Holbert. “Cuando se habla de
bateadores de promedio, se destaca no solo su capacidad para conectar la bola
con fuerza sino para encontrar huecos donde colocar sus conexiones y José puede
hacer eso, pone la bola en juego de cualquier manera”.
En sus últimos 10 encuentros, antes de la jornada del
sábado, el barinés apenas golpeaba .225 (40-9), pero mantenía un average global
de .339 más un destacado .807 de OPS, tomando en cuenta que no es un hombre de
poder.
“Ahora mismo atravieso por un slump, pero de eso se trata el
beisbol. Nunca debes tener miedo a fallar. Lo bueno es que estoy conectando
bien la bola, así que en cualquier momento los batazos comenzarán a caer.
Restan unos 20 encuentros y veremos qué ocurre”.
Peraza inició la zafra como el tercer mejor prospecto de
Atlanta, de acuerdo con MLB.com y luego de asistir al Juego de Estrellas
Futuras apareció como el número uno en las filiales de los Bravos.
“Fue una experiencia inolvidable. Estar en un parque de
grandes ligas (Target Field) y jugar
allí, compartiendo con tantas figuras, es como un sueño cumplido. Pero no dejo
que eso desvíe mis objetivos. No me presiono por lo que se dice de mí. No
llegas a las mayores por el solo hecho de ser considerado prospecto. Otros se
han establecido y convertido en figuras sin ser valorados de esa manera. Pienso
que con trabajo y esfuerzo uno puede llegar lejos”, enfatizó con aplomo, pero
sus credenciales y su talento le preceden.
Foto GOMBRAVES |
En su primer turno con el equipo del Resto del Mundo corrió
4.06 segundos de home a primera para apuntarse un hit al cuadro, tras conectar
un roletazo a la tercera base. Su velocidad llamó la atención de los scouts de
los otros 29 equipos que asistieron a las festividades del Juego de Estrellas
en Minnesota. Solo que Peraza ni siquiera estuvo cerca de su promedio este año,
que osciló entre 3.9 y 4.1 segundos. Algo notable, tratándose de un bateador
derecho.
Esa velocidad de piernas lo ayuda a apuntarse varios infield
hits y a convertir varios sencillos en dobles y biangulares en triples,
mientras que le ha ayudado a robarse 60 bases o más en 2013 y 2014. Guarismos
de élite.
“Siempre supe que iba a batear, estaba seguro de ello. Tenía
dos herramientas muy claras: velocidad y bate. Claro, obviamente lo que está
haciendo este año no deja de sorprender. Pero cuando recomendé su firma (en
2010 por un bono de 350.000 dólares) tenía la aproximación adecuada cuando iba
al plato, así que podía desarrollarla aún más”, detalló Rolando Petit,
coordinador de scouts de Atlanta en el país.
Trabajador incansable
Peraza comenzó a pulir su bate y su
habilidad para correr las bases en 2011, en el complejo de Atlanta en República
Dominica.
“La persona que más influyó en mi juego fue (el cubano)
Francisco Santiesteban. Me enseñó todo lo que sé de bateo”, enfatizó Peraza.
“Se le plantearon tres tareas”, recordó Petit. “La primera
era llevar sus conexiones a la derecha, es decir a la banda contraria de su
mano, y tocar la bola. Así que en cada práctica, en cada partido lo intentaba.
Además de salir al robo cada vez que tenía esa posibilidad. Es un trabajador
insigne y lo bueno es que evoluciona, porque puedes tener esa vocación de
trabajo, pero si tu techo es corto, entonces no avanzas. José absorbe todo lo
que se le dice y lo pone en práctica”.
Sus actuales mentores, Moses y Holbert, pueden dar fe de
ello.
“Aprende cada día y los coaches para los que juega siempre
lo elogian”, puntualizó Petit.
Peraza agradece a Dios por sus dones para jugar beisbol y
espera paciente el fruto de su trabajo. Le entusiasma la idea de “terminar
fuerte” para ayudar al Mississippi, que está peleando el primer lugar de su
circuito, “a meterse en la postemporada”. Le gustaría mantener a la distancia
su duelo con Altuve, pero su temporada termina el 1° de septiembre.
“No sabía que estábamos tan parejos en hits (risas). Lo
importante es seguir adelante y ver hasta dónde podemos llegar aquí. Dejo todo
en manos de Dios. De mi parte seguiré trabajando a diario. Es lo único que
puedo controlar”.
En Atlanta tal vez lo premien con una inclusión en el roster
de 40 a
finales de año, mientras cuentan los días para tenerlo arriba y sacarle
provecho durante varios años a su talento.
Del campocorto a segunda
José Peraza fue firmado como campocorto y en cualquier
organización sería el futuro de esa posición, pero los Bravos cuentan con
Andrelton Simmons, uno de los mejores en las mayores. Así que este año, el
barinés fue movido a la segunda, donde Atlanta espera que se establezca, pese
al buen desempeño que ha tenido Tommy La Stella , tras el bajo rendimiento y posterior
despido de Danny Uggla.
“La campaña anterior cometí varios errores en el short, pero
allí he jugado toda mi carrera. En la Liga Instruccional
comenzaron a ponerme en la intermedia. Había jugado poco allí, pero este año me
dijeron que esa sería mi posición. Todavía me estoy adaptando, trabajando en
los dobleplays. Es menos espacio para cubrir, pero todo es diferente”, explicó
Peraza, que pese a las 29 pifias de 2013, salvó 20.4 carreras, la segunda cifra
más alta entre sus colegas de ligas menores de acuerdo con el índice FRAA
(siglas en inglés de fildeo por encima del average) de Baseball Prospectus.
“Siempre debes explorar las posibilidades que tiene un
pelotero para llegar a las grandes ligas. Nunca firmas un shortstop que no
tenga habilidades para desempeñarse en segunda y viceversa. Es un infielder
medio y no debería tener problemas para hacer la transición, como de hecho lo
está demostrando”, glosó Rolando Petit. “Estamos hablando de un pelotero que
tiene tres frentes: el bate, la velocidad y la defensa. Yo agregaría una cuarta
herramienta: su talante. Trabajará hasta convertirse en un camarero solvente”.
ElDato
José Peraza es reserva de Cardenales de Lara en la Liga Venezolana de
Beisbol Profesional.
Esta nota apareció publicada en el diario El Nacional el 10 de
Agosto de 2014
No hay comentarios:
Publicar un comentario