Un día después de perder en semifinales, el manager
Anzoátegui hizo un balance de la exitosa campaña de sus dirigidos
SAN JUAN
Omar López no pudo ocultar su desazón después de la derrota
que sufrió Anzoátegui en las semifinales, a manos de los Vegueros de Pinar del
Río, pero casi 24 horas después del duro golpe, el estratega volvió a mostrar
la serenidad que le caracteriza.
“Le agradecí a la gerencia, a todos los peloteros, a las
personas que hicieron posible esta temporada de ensueño. El broche de oro era
el título aquí en Puerto Rico, pero el partido de anoche te ofrece más razones
para entender la vida y cómo es el beisbol, la imperfección de las cosas”,
señaló el estratega, luego de dar un breve paseo por la isla con su familia.
“Fue frustrante ver, después de mantener la consistencia por mucho tiempo, como
nos sucedían tantas cosas malas en un solo día. El formato no nos ayuda a
recuperarnos mentalmente, pero eso lo dirá el tiempo. Estoy bastante contento
con lo que se logró”.
Anzoátegui terminó con récord de 58-31 incluidas todas las
fases de la temporada y el Clásico Caribeño, lo que iguala el récord de
triunfos para un club de la LVBP en un año, que antes compartían Cardenales de
Lara (58-35, .624), en la zafra 1997-1998, y Tigres de Aragua (58-33, .637), en
la 2006-2007. Solo que los orientales lograron un mejor porcentaje de triunfos
(.652).
“Estuve al tanto de todos esos logros, tanto en 2014 como de
2015”, destacó el pilota valenciano. “Realmente pensé que era muy difícil
engranar a tantas personas en una misma página para hacer que Caribes tuviera
una campaña exitosa. El secreto fue la nobleza y la humildad de los que
componen la tribu. Le ganamos a todo el mundo. No pudimos llevarnos la serie,
pero si el campeonato en Venezuela. Fue una tarea bien difícil durante cuatro
meses para llegar a ese punto. Debemos sentirnos orgullosos. Ahora el reto será
mayor en la próxima temporada porque es importante volver a ser contendores
para otra posible final”.
López piensa que puede volver a reunir el núcleo que ha
convertido a la tribu en el equipo más dominante en el último lustro.
“Ese será mi trabajo”, terció Samuel Moscatel, gerente
general de Anzoátegui. “Algunas personas me preguntaron por qué traje a Oswaldo
Arcia a última hora. Bueno, llegó y conectó el jonrón que nos ayudó a ganar el
juego para asegurar el primer lugar. Mi responsabilidad, como gerente, es
tenerlos todos acá y que estén contentos para darle a Omar el mejor equipo
posible”.
Desde la 2010-2011, los orientales exhiben récord de 180-135
en la ronda regular, lo que les da un porcentaje de triunfos de .571, el mejor
de la LVBP durante ese lapso. Siempre han clasificado, suman tres finales y dos
títulos.
“Pienso que estamos construyendo una dinastía. Los Tigres de
Aragua ganaron seis campeonatos en 10 años, nosotros llevamos dos en cinco.
Veremos qué pasa en las próximas cinco campañas. El material criollo, la
motivación y el compromiso están allí. Tengo mucha fe de volver a contar con
ellos, entre un 95% o 99% en la 2015-2016”, enfatizó Moscatel.
López, que antes del encuentro contra los Vegueros había
sido ratificado en su cargo, viajará mañana a Estados Unidos para comenzar los
preparativos con el Lancaster (A+), su nuevo equipo en las filiales de los
Astros de Houston en 2015.
“Ha sido un gran aprendizaje. No cambiaré nada de lo que ha
dado éxito. Seguiré hablando con mis peloteros para tenerlos a todos en la
misma página. Sigo siendo el mismo. Esa ha sido la clave”, puntualizó el
estratega, de 38 años de edad.
Moscatel también tratará de mantener el curso de la travesía
que trajo a su club hasta la Isla del Encanto.
“Estoy muy orgulloso de toda la temporada. Súper orgulloso”,
concluyó el directivo.
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