lunes, 7 de febrero de 2011

Décimo Inning


Jesús Montero se alista para comenzar su tercer entrenamiento primaveral con los Yanquis en Tampa, Florida. En los dos años anteriores, las posibilidades del valenciano de quedarse en el equipo grande eran limitadas. Esta vez acude a las prácticas con posibilidades reales de conseguir un cupo y estrenarse en las mayores en abril.
Montero mantiene su estatus de principal promesa de los neoyorquinos, de acuerdo con Baseball America, pero ahora aparece como el número uno entre los catchers de todo el sistema de granjas de las mayores y subió 10 escaños, en relación con 2010, para ubicarse en el noveno lugar entre los 50 mejores prospectos de las grandes ligas.
A principios del año pasado surgieron algunas dudas con relación a su bate, pero el carabobeño las disipó. Era su primera zafra en triple A y tardó en hacer el ajuste. Hasta el 6 de junio apenas exhibía un anémico .214 de promedio, lo que impidió que asistiera a su tercer Juego de Estrellas Futuras consecutivo. En la segunda mitad se sacudió el letargo y cerró con un OPS de 1.080, una extraordinaria línea de producción de .351/.396/.684 y 14 cuadrangulares, en 44 encuentros. El mensaje fue claro.
Montero no tiene nada que probar con su madero en ligas menores, mientras que su defensiva no luce tan mal si le compara con la del veterano Jorge Posada, que iniciará la zafra con 39 años de edad.
El piloto del club, Joe Girardi, un eficiente mascota en sus días de activo, ha estado conversando y trabajando con el novato desde el spring training del año pasado, para contribuir con su aprendizaje.
“Jesús viajó hoy (el sábado) a Tampa para iniciar su preparación. Está consciente del reto que tiene delante y de su chance de quedarse”, destacó Félix Olivo, representante en Venezuela de la firma West Coast Sports Management, que maneja a Montero.
El joven de 21 años de edad intentará colarse como catcher a medio tiempo y bateador designado. Sus competidores serán Francisco Cervelli y Austin Romine, ambos conocidos por sus cualidades detrás del plato. Aunque también está la alternativa del recién llegado Russell Martin, si se encuentra saludable.
“Creemos que puede desempeñarse en la posición”, declaró Brian Cashman, gerente general de la organización, al blog Trentonian.
“La defensiva es algo que debe trabajarse durante mucho tiempo, para mejorar. Derek Jeter cometió 56 errores en la Liga del Sur del Atlántico. Para eso están las menores. Montero ha estado cerrando la brecha”.
La pregunta es si terminará los entrenamientos con el uniforme de los Yanquis. En julio del año pasado, Montero estuvo muy cerca de empacar sus pertenencias y mudarse a Seattle, como piedra angular del cambio por Cliff Lee. Sólo que la gerencia de los Marineros desestimó el ofrecimiento y prefirió recibir a Justin Smoak y tres prospectos de los Rangers, a cambio del zurdo.
La semana pasada, el nombre del venezolano volvió a ser incluido en rumores de canje, cuando Andy Pettitte anunció su retiro. Los Yanquis, que no pudieron firmar a Lee como agente libre, estarían interesados en fortalecer su rotación. Pero incluso sin el estimado Pettitte, sus abridores incluyen a C. C. Sabathia, un perenne candidato al Cy Young, Phil Hughes, que ganó 18 juegos con 24 años, y A. J. Burnett, que no podrá tener una peor campaña que la anterior. Para llenar los otros dos espacios restantes escogerán entre Freddy García, Bartolo Colón, Iván Novoa, Sergio Mitre e incluso Andrew Brackman. Cualquiera de las alternativas abriría una ventana de espera hasta mediados de campaña (31 de julio), cuando seguramente estarán disponibles abridores.
Ese escenario le daría al alto mando de los Yanquis la oportunidad de observar a Montero competir por un puesto y evaluar su capacidad de respuesta, si es que realmente sopesan la posibilidad de de un canje.
“Está muy cerca de lo que deseamos. Defensivamente, es mejor que algunos catchers que están en las mayores en este momento”, afirmó Cashman.

Esta columna apareció publicada en el diario El Nacional el  7 de febrero de 2011

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