El prospecto fue
subido ayer por Detroit e instalado en el roster de 25 de los Tigres justo a
tiempo para ser elegible en la postemporada
El sueño de Avisail García fue interrumpido en horas del
mediodía. El jardinero y el resto de sus compañeros de los Lobos Marinos de
Erie, habían regresado a casa a las 6:00 de la mañana, después de disputar una
serie en Bowie, Maryland.
"El teléfono sonaba insistentemente y, cuando al fin
contesté, era el mánager (Chris Cron). Me decía que recogiera todo porque me
iba a las grandes ligas. `No bromees con eso.
No te creo’, le contesté, pero insistió `Vamos, chico, vas
para Detroit’. Entonces me desperté. Es la mejor noticia que me han dado para
levantarme de la cama", dijo por teléfono el quinto mejor prospecto de los
Tigres, de acuerdo con Baseball America.
"No podía con la alegría. Después de colgar llamé a mi
mamá (Iris Yaguarín) en Venezuela, la que sabe por lo que he pasado y los
sacrificios que he hecho. Fue una emoción tan grande que no puedo
explicarla".
El jardinero, de apenas 21 años de edad, aparecía entre los
candidatos de los bengalíes para ser subidos a partir de hoy, cuando los
rosters activos se expanden de 25 a 40.
Pero la organización decidió adelantar las cosas y ayer
colocó en asignación al versátil Jeff Baker para abrirle un cupo a García,
justo en la fecha límite para poder ser elegible cuando se inicie la
postemporada.
"Desde enero, cuando comencé a prepararme en la
academia de los Tigres (en Carabobo) con (el coach) Josman Robles, y después en
los entrenamientos de primavera me mentalicé para tener un buen año. Pero
cuando me llamaron sólo sabía que iba a terminar la temporada en ligas menores.
Así que no dejó de ser una sorpresa", agregó.
El anzoatiguense tiene velocidad de piernas para jugar en el
jardín central, buena defensa y un brazo 70 en la escala de los scouts del 20
al 80. Puede batear hacia todos los jardines y la bola le salta del bate.
Al momento del ascenso atravesaba por una sólida campaña.
Entre clase A y doble A de golpeaba para .299/.333/.455, con 17 dobles, 8
triples, 14 jonrones, 58 impulsadas y 23 robos en 31 intentos.
"He tratado de ser más paciente en el plato, esperar mi
pitcheo para hacer contacto.
Cuando estoy en dos strikes recorto el swing y eso me ha
ayudado con el promedio (el más alto de su carrera). No busco jonrones. Esos
salen solos".
Ahora se reencontrará con su mentor, Miguel Cabrera. Uno de
los mejores bateadores de las grandes ligas.
"En los entrenamientos de primavera andaba detrás de
él, preguntándole de todo. Es una gran persona y, a pesar de todo lo que tiene,
sigue siendo humilde y nunca dejar de entrenar fuerte. Eso fue lo que
enseñó".
A García le tomó apenas un lustro llegar a las mayores y
aspira a quedarse por mucho tiempo. "Es mi sueño y voy a trabajar para
lograrlo".
Machí, el primero de
septiembre
Jean Machí apareció en 371 partidos durante una larga década
en ligas menores, antes de ser llamado ayer por los Gigantes de San Francisco.
El relevista derecho se estaba desempeñando como cerrador del Fresno, en la
Liga de la Costa del Pacífico (AAA) y exhibía efectividad de 3.97, con 15
salvados.
"Mi hija (Jeanmary, de 3 años) escuchó que el teléfono
estaba vibrando esta mañana y me despertó. Era el manager (Bob Mariano) que
trataba de avisarme que debía viajar a Chicago, donde me uniría al equipo. Abracé
a mi esposa (Yaniré) y le dije que la espera había terminado", contó el
derecho de El Tigre, por teléfono.
"Siento que durante todo este tiempo maduré como
persona y lanzador. Pienso que los Gigantes lo notaron y me dieron la
oportunidad", aseguró con la serenidad que le brindan sus 30 años de edad.
"El año pasado llegué tarde a los entrenamientos y me prestaron a los
Diablos Rojos (de México). Al final terminé con el Fresno y este año fui uno de
los últimos que cortaron en el spring training. Nunca dejé de confiar en lo que
podía hacer".
Machí será un brazo fresco para el bullpen del manager Bruce
Bochy, en el último mes de campaña.
"Me he enfocado en lanzar strikes, ya no soy el pitcher
que trata de ponchar a todos los rivales. Lo importante es sacar los outs. Fue
lo que aprendí con Magallanes cuando me dieron la responsabilidad de ser el
taponero. Al cuerpo técnico de la nave le debo estar aquí y no pienso cambiar
nada".
Machí se encontrará con Pablo Sandoval, Héctor Sánchez,
Grégor Blanco, Marco Scutaro y José Mijares.
"Será de gran ayuda tenerlos como compañeros",
agregó el relevista, que desde hoy es noveno integrante del grupo de peloteros
venezolanos que han subido a las grandes ligas por primera vez después de haber
cumplido los 30 años y el primero desde que lo hicieran Jean Carlos Boscán
(2010) y José Yépez (2011).
"Nunca es tarde cuando la dicha llega", sentenció
Machí.
Esperan turno
Las próximas horas podrían revelar los nombres de nuevos
grandesligas venezolanos por la expansión de los roster a 40.
Oswaldo Arcia, de
21 años de edad, está en medio de la mejor campaña en su brillante trayectoria
en ligas menores con Minnesota. El bateador zurdo ha impuesto marcas personales
en hits (141), dobles (36), jonrones (15) y empujadas (91), mientras que exhibe
una sólida línea de producción (.315/.386/.528).
Henry Rodríguez,
de 22 años, impresionó al manager de los Rojos, Dusty Baker, durante el spring
training. Un bateador ambidiestro con promedio vitalicio de .300 en ligas
menores, buen guante en la segunda base, que puede jugar en el campocorto y la
antesala.
Bruce Rondón, de
21 años, recientemente ascendido al Toledo (AAA) tras comenzar en clase A, es
dueño de una recta que ha sido medida entre 99 y 102 mph y ha demostrado
condiciones para cerrar partidos. Suma 28 salvados repartidos entre los tres
principales niveles de las granjas de Detroit. Tiene en contra que no está en
roster de 40.
Wilmer Font, de
22 años, perdió 2011 tras someterse a una cirugía Tommy John pero logró
regresar con una recta de 95 mph y ha logrado mejorar sus pitcheos secundarios
(cambio y curva).
Impresiona su promedio de ponches por cada 9 innings (12,5)
en 97.1 innings repartidos entre A+ y AA.
César Hernández,
el miembro más joven del roster de 40 de los Filis, podría encontrar su ruta a
las mayores en pocos días. El camarero, de 22 años, bateó muy bien en AA y se
encuentra en Lehigh Valley (AAA). Los problemas de lesiones de los infielders
medios de los cuáqueros le dan una opción.
Carlos Rivero, de
24 años, está ligando .304/.349/.436 con el Syracuse (AAA) y podría darle
profundidad al infield de Washington.
Esta nota apareció
publicada en el diario El Nacional el 1° de septiembre de 2012
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