El prospecto sorprende por su capacidad ofensiva. El segunda base fue el mejor bateador de Houston en la categoría clase A en abril y encabeza todas las ligas menores con 47 hits
A lo largo de su carrera, José Altuve siempre ha tenido que responder preguntas sobre su estatura de 1.65 metros y, en algunos casos, soportar insinuaciones y bromas. Desde el año pasado su actuación en el terreno le ha dado la categoría de prospecto de los Astros de Houston y ya no sólo es ponderado por sus características físicas.
“Pienso que los comentarios sobre mi estatura me motivaron e hicieron que me esforzara mucho más. Pero en Houston ya no se habla tanto del tema porque he demostrado que puedo jugar pelota”, señaló el maracayero, de 21 años de edad, vía telefónica.
En 2010, el segunda base inició la temporada con el Lexington (clase A) y terminó en el Lancaster (clase A+). En 125 partidos dejó un promedio combinado de .301 y estableció marcas personales en jonrones (15), producidas (67) y robos (42).
Este año, los siderales lo seleccionaron como Jugador del Mes de abril, en la categoría clase A, con el Lancaster, tras un tórrido inicio de verano que le tiene liderando todo el sistema de granjas de las mayores con 47 hits, en tanto que su promedio de .388 es el cuarto mejor en la Liga de California.
“El año pasado apenas jugué tres semanas en ese circuito. No ha sido fácil la adaptación, pese a los resultados. Creo que los entrenamientos de primavera y mi experiencia con Magallanes, en el invierno, me ayudaron mucho. Trabajé en mi swing y en la defensiva. Los resultados se están viendo”.
Félix Francisco, asistente especial a la gerencia de Houston en Latinoamérica, echó mano a los elogios cuando se le pidió que opinara sobre Altuve.
“El pequeñito Altuve es un jugador bastante interesante. Nosotros creemos en él a pesar de su tamaño”, destacó el dominicano. “En su primer partido de la temporada conectó triple y completó uno de los mejores dobleplays que se hayan visto en la Liga de California en los últimos años”.
En zafras anteriores, la defensa era señalada como una falencia en el juego de Altuve, sobretodo al momento de realizar las dobles matanzas. Pero en lo que va de calendario suma 20 dobleplays y en 142 lances exhibe .979 de porcentaje de fildeo.
“Me ayudó mucho poder compartir tiempo durante las prácticas y en los partidos con Andrés Eloy Blanco, Argenis Díaz y Edgardo Alfonzo, como segunda base de Magallanes. Me dieron muchos consejos, aprendí con ellos y con (el coach) José Alguacil aspectos clave de la posición”, refirió.
Altuve también ha usado su velocidad e inteligencia como armas. Dos virtudes a las que se les puede sacar provecho tanto a la ofensiva como a la defensiva.
“Le llega a pelotas por su velocidad y sabe cómo jugar beisbol. Si a eso agregas que cuando está en el plato cualquier cosa puede pasar –desde un toque de bola, pasando por una conexión, como bateador derecho, a la banda contraria que puede convertirse en doble, hasta un jonrón–, entonces estamos en presencia de un pelotero que debe ir ascendiendo”, aseguró Oscar Alvarado, supervisor de scouts de Houston en el país.
Altuve se ha robado 108 bases en su carrera de poco más de cuatro años y apenas ha sido captura 35 veces. Este año ha llegado quieto en 15 de 19 intentos (79%), cifra que acompaña con una extraordinaria línea de producción (.388/.436/.562), además de un notable OPS de .998.
Un jugador pequeño, rápido, con buen guante, que puede ofrecer una buena ofensiva y que ayuda a mejorar la producción de la parte media de la alineación.
Con ese perfil, las grandes ligas no lucen como una quimera. Eddie Collins, miembro del Salón de la Fama, tenía características similares y aparece como segundo mejor camarero de la historia en el ránking que estableció Bill James en su Baseball Abstract. Aunque no hay que ir tan lejos. Dustin Pedroia es un ejemplo mucho más cercano.
Sin embargo, existen opiniones encontradas en torno al futuro de Altuve.
“Es divertido observarlo, pero su historial no es muy atractivo”, enfatizó Jim Callis, editor ejecutivo de Baseball America y una referencia cuando se habla de prospectos. “Su principal herramienta es la defensiva y, tal vez, el bateo, si realmente crees en él. Su contundencia ofensiva y velocidad no son especiales. Además, ¿cuántos jugadores de su talla se consiguen en las mayores? Creo que su techo es el rol de utility”.
Mike Newman, de scoutingthesally.com, no es tan radical. “Fue uno de mis peloteros favoritos en 2010. El chico puede batear. Punto. Se necesitan prospectos como Altuve, porque no tienes a otros con quién compararlo. Honestamente, lo más fácil es escribir en un reporte que, por su talla, cuando mucho llegará a ser un suplente de infield. Pero si en Baseball Reference apareciera que mide 1,85 metros, estaríamos discutiendo incluirlo entre los mejores 100 prospectos. Así que sería irresponsable descartarlo”.
Francisco insistió en que recibirá la oportunidad de seguir ascendiendo en Houston. “Pensamos que este año terminará en doble A”.
Altuve también tiene su opinión. “(Alexi) Amarista es un tremendo pelotero. Llegó a las grandes ligas y es un poco más alto que yo (tres centímetros). Pienso que eso abrirá los ojos de los equipos. Por mi parte, siempre salgo al terreno a jugar como si fuera mi último partido”.
Esta nota apareció publicada en el diario El Nacional el 9 de mayo de 2011
No hay comentarios:
Publicar un comentario