Foto EL NACIONAL |
El maracayero no tiene restricciones de los Gigantes
y en principio verá más acción detrás del plato que el año pasado
VALENCIA
Héctor Sánchez todavía no sale del asombro de haber
ganado un anillo de Serie Mundial en su primera temporada completa con los
Gigantes.
“Fue una experiencia extraordinaria”, aseguró el
grandeliga, que se desempeñó como suplente de Buster Posey y jugó un papel
importante durante la eliminatoria para el equipo que dirigió Bruce Bochy.
Sin embargo, no olvida a los Tiburones de La Guaira
y de no ser por un compromiso familiar hubiese visitado a sus compañeros en el
Estadio José Bernardo Pérez ayer, antes del partido contra los Navegantes del
Magallanes.
“Claro que tengo pensado jugar con los Tiburones. Los
aficionados pueden confiar en que será así”, dijo Sánchez, que ayer visitó las
instalaciones de la Academia OL Baseball Group, en San Joaquín, donde se formó
antes de ser reclutado por San Francisco en 2006. “Llegué el domingo a
Venezuela y quiero pasar el día de mi cumpleaños (17 de noviembre) con mi
familia (en Maracay). Luego me uniformaré (en la séptima semana del campeonato,
que comienza el 20 de noviembre)”.
Sánchez, que apareció como designado en el tercer
juego de Clásico de Otoño, vio limitado su trabajo durante la postemporada y
los Gigantes quieren que recupere el tiempo perdido.
“No tendrá ningún tipo de restricciones, al menos
hasta ahora. San Francisco quiere que vea acción en la receptoría y consiga ritmo
de juego”, señaló Félix Olivo, agente del receptor. “La gerencia de los
Gigantes entiende lo importante que fue para el desarrollo de Héctor jugar en la
LVBP. Lo ven como el catcher del futuro del equipo, si Posey en definitiva pasa
a la inicial”.
Sánchez, de 22 años de edad, ligó .339 de promedio,
con 9 jonrones y 39 impulsadas, en 51 encuentros con La Guaira la temporada
anterior, un rendimiento que le mereció ser electo Novato del Año.
“Esta pelota me ayudó mucho. De aquí salí a ganarme
un puesto en el spring training (por encima de los experimentados Eli Whiteside
y Chris Stewart). Luego llegué a ser catcher personal de Barry Zito y luego de
Tim Lincecum. Todavía no lo creo”, destacó Sánchez, que golpeó .280/.295/.390,
en 74 desafíos con los Gigantes.
Para darle mayor exposición detrás del plato, la
organización californiana quiere que se desempeñe buena parte de lo que resta
de eliminatoria como careta de los Tiburones, a diferencia del año pasado
cuando sólo podía hacerlo tres veces por semana.
“En esta ocasión aspiran a que descanse los fines de
semana, pero es algo que debe compaginarse con los intereses de La Guaira”, advirtió
Olivo.
Tal vez la petición sea compatible con el plan de
trabajo de Salvador Pérez, mascota titular de Kansas City, que sería usado la
mayor parte del tiempo como designado, cuando se incorpore al equipo, de
acuerdo a lo dicho por la gerencia del club.
“Lo importante es que quiero estar con La Guaira y
voy a jugar”, enfatizó Sánchez, que se entrenará en San Joaquín, cerca de su
casa en Maracay, hasta que se incorpore a los litoralenses.
Como
en casa
Sánchez asegura que la transición de jugar poco más
de una docena de encuentros en las mayores durante 2011 a estar toda la campaña
arriba este año, fue mucho más fácil por la presencia en San Francisco de Pablo
Sandoval y Grégor Blanco, con quien comparte en La Guaira, y más tarde con la llegada
de Marco Scutaro, José Mijares, Jean Machí y Yusmeiro Petit.
“De niño mi sueño era llegar a las grandes ligas.
Ahora puedo decir que asistí a una Serie Mundial y la gané, que es lo que
aspira todo pelotero que está en las mayores. La satisfacción es enorme cuando
miras alrededor y ves a tantos venezolanos. No puedo describir la emoción”.
Salvador
Pérez hasta diciembre
El grandeliga Salvador Pérez anunció ayer que
debutará con La Guaira el próximo martes.
“Desde el lunes me estoy entrenando. (El martes)
enfrenté a lanzadores en la Liga Paralela y me sentí bastante bien”, dijo el
receptor de Kansa City, que hoy recibirá 4 entradas y mañana 5 en la filial de
los Tiburones. Luego practicará el sábado en el Universitario y será inscrito
en el roster de 34 el lunes. “Me quedaré hasta diciembre y sólo podré recibir
tres partidos a la semana. El resto como designado”.
Esas restricciones no impedirán que disfrute jugar
en la LVBP. “Siempre he querido vestir este uniforme y que mi familia me vea
jugar”, dijo el valenciano, de 22 años de edad, que ayer visitó a sus
compañeros, antes del partido contra Magallanes.
Esta nota apareció
publicada en el diario El Nacional el 8 de noviembre de 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario