Foto: Luis Patiño |
El utility consiguió tomar un mayor número de turnos de calidad con los Tigres, que le ayudaron a subir su promedio de embasado, y espera que sus progresos en la 2015-2016 le ayuden a quedarse arriba con Milwaukee
Santo Domingo, República Dominicana.- Hernán Pérez se unió a
los Tigres de Aragua durante la primera semana de la ronda regular, con poco
más de una semana de descanso, después de terminar la temporada de Grandes
Ligas con los Cerveceros.
Desde entonces, se convirtió en la figura de mayor
producción en el lineup del manager Eduardo Pérez, tras encabezar los
departamentos de jonrones (8) y remolcadas (33), mientras establecía marcas
personales en todos los renglones ofensivos, luego de disputar su primera
temporada completa en la LVBP.
Pérez se entusiasma cuando observa en retrospectiva lo que
hizo, pero se queda con una estadística: su porcentaje de embasado (.331).
“En Venezuela no dejas de aprender. Trabajas mucho. Aprendes
a batear. El éxito durante la temporada tuvo que ver con tener más paciencia en
el home plate. Seleccioné mejores pitcheos y pude conectar mejor la bola. Ese
fue el plan cuando llegué a Venezuela, trabajar en mi bateo, ya que mi defensa
es buena. SI bateas tendrás chance en cualquier lado”.
Pérez, ex prospecto de los Tigres de Detroit, llegará a los
entrenamientos de primavera de Milwaukee como invitado, con la posibilidad de
hacer el equipo. Es una organización en reconstrucción y varias posiciones
estarán abiertas a la competencia, entre ellas la tercera base, donde terminó
jugando el final de la zafra de 2015.
El aragüeño sabe cuáles serán las circunstancias que
encontrará, cuando se reporte a finales de mes al bunker de los lupulosos en
Arizona, y eso lo llevó a seguir con Aragua hasta la Serie del Caribe, para
llegar mejor preparado y de esa manera asumir el reto de comenzar con el equipo
grande en 2016.
“En principio iba a jugar hasta diciembre, pero creo que en
realidad me motivaron los fanáticos para quedarme, estar en los playoffs y la
Final, y conseguir mi primer título. Entonces, ¿por qué no venir a Santo
Domingo? Es apenas una semana más en la que puedo sumar 30 turnos, que son
buenos. No creo que me afecte. Los entrenamientos comienzan el 24 de febrero y
voy a tener dos semanas libres. Ese fue el mismo plan cuando me incorporé a los
Tigres. Descansé una semana, comencé a jugar y me fue bien. Espero repetirlo
con Milwaukee”.
Pérez sigue sin modificar nada de lo que le ha dado
resultados cuando empuña el madero. En la postemporada su OBP es de .340.
“La clave es ir con un plan preestablecido. En mi caso,
salía siempre pensando en conectar la bola entre los pasillos para ver si
salían dobles o triples, gracias a Dios pude hacerlo”.
También se fueron del parque una buena cantidad de pelotas,
la tercera cifra más alta de la LVBP.
“No soy un jonronero. Esos ocho vuelacercas los conecté
porque siempre estaba buscando líneas. Tratando de poner la pelota en juego, en
los momentos oportunos, y conseguí los pitcheos adecuados para darle a la bola
con contundencia y, en esas oportunidades, se fueron del parque”.
En parte de cuatro campañas en las Mayores, su línea
ofensiva vitalicia es de .235/.251/.307, luego de 336 turnos repartidos en 156
desafíos. Así que deberá tratar de replicar la disciplina en el plato que
consiguió con Aragua, cuando comience la Liga del Cactus, para poder llamar la
atención.
Al menos por ahora, aparecen como candidatos a la antesala
de Milwaukee el novato boricua Yadiel Rivera, de 23 años de edad, que puede
moverse por todo el infield y debutó el año pasado; Colin Walsh, una máquina de
embasarse de la organización de los Atléticos (.395 OBP en seis temporadas de
ligas menores), que fue tomado en el Draft de Regla 5, y el veterano Aaron
Hill, que llegó procedente del cambio con Arizona, que involucró a Jean Segura,
el mes pasado.
Pérez tiene a la versatilidad de un guante seguro, que no
solo puede cubrir la antesala, el campocorto, la segunda base y la inicial,
sino que también puede tapar un hueco en el jardín izquierdo, si es necesario,
como lo hizo con los Tigres en la postemporada.
“Siempre me enseñaron que no ligara la defensa con el bateo.
Son cosas muy diferentes. Si no te va bien bateando puedes hacer la jugada del
partido, cuando estás cubriendo. La defensa no me preocupa”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario