Baldwin encuentra su balance en el yoga

Foto HENRY DELGADO

El derecho practica la disciplina desde hace un par de años y se sobrepone al cansancio de una larga temporada. Asegura que se quedará con Caribes hasta el final 

Andrew Baldwin no intenta sumar los innings que acumuló durante el verano a los que ha trabajado con Caribes, desde el inicio de la campaña. “Muchos. Ya comienzo a sentir el cansancio”, sonrió.
Mike Álvarez, coach de pitcheo de Anzoátegui, no se preocupa en exceso. Ha sido cuidadoso todo el año con el conteo de envío del cuerpo de lanzadores de la tribu, en espacial de los abridores como el derecho estadounidense.

“Han sido eficientes con sus pitcheos. En la mayoría de los casos son menos de 100. Cuando están alrededor de los 90, es una buena salida para ellos. Así que no ha sido tan exigente”, explicó el experimentado técnico.
Los tiradores que fueron usados para iniciar partidos a lo largo de la eliminatoria acumularon 329.1 entradas, más que ningún otro equipo. Baldwin encabezó la LVBP con 82.2 capítulos y en la semifinal acumula 13.0. Antes, con el Rochester, filial triple A de Minnesota, laboró por espacio de 143.2.
“Pienso que el secreto de su resistencia es el yoga”, reveló Álvarez.
“Bueno, al menos no lastima a nadie”, señaló el importado, que ayer se medía a los Tigres. “Pero, realmente, sí ayuda”.
Baldwin comenzó a practicar la ancestral disciplina física y mental, que se originó en la India, hace poco.
“Fue hace un par de años. Vivo en Portland, Oregón. Un lugar muy interesante para seguir estilos de vida alternativos y ese tipo de cosas. Aprendí de algunos amigos y comencé con la holística, a alimentarme bien y el yoga. Creo que eso me ha funcionado con el beisbol”.
El derecho, de 29 años de edad, realiza sus rutinas dos veces al día. Una hora y media después de levantarse y durante algunos minutos antes de ir al terreno de juego.
“Aunque estoy aquí por la emoción. Me tomo esto muy en serio. Todo pitcher quiere lanzar, Mike Álvarez sabe de qué hablo, él lo entiende. Si no quieres seguir allá afuera, entonces simplemente debes dejar lo que estás haciendo. Aquí el beisbol y todo lo que le rodea es excepcional. Los aficionados están muy metidos en el juego. Es un mundo totalmente diferente. En Estados Unidos juegas muchos partidos y comienzas a perder la emoción.  Agradezco esta oportunidad”.
Baldwin ha sabido controlar esas emociones mientras se encuentra sobre el montículo, gracias a su nueva técnica y al conocimiento del circuito. Está en su tercera campaña en Venezuela, segunda con la tribu después de debutar en la 2008-2009 con Lara. 
“Son apenas ocho equipos y enfrentarte repetidas veces a los bateadores ayuda, imagino que funciona también para ellos. Pero te da una idea de lo que vas a hacer en cada juego. Eso no quiere decir que harás más fácil tu trabajo, sólo ganas un poco más de confianza”.
En Anzoátegui espera que no pierda esa confianza. Su presencia en los últimos dos años ha sido fundamental en el rendimiento del club.

ComprometidoHace un año, Baldwin no pudo acompañar a los Caribes en la final y se perdió la celebración del título. Había firmado un contrato con Minnesota y quería llegar descansado  a los entrenamientos de primavera. Ahora las cosas han cambiado.
“No tengo trabajo para la próxima temporada. Quizás sea la última que lance en mi carrera y debe buscarme un trabajo normal. Así que no tengo nada que perder. Iré tan lejos como pueda. Quiero estar hasta el final”.

ElDato
Andrew Baldwin fue Pitcher del Año en la campaña 2010-2011. Además de Anzoátegui y Lara, también ha jugado con Caguas en Puerto Rico (2009-2010).











                                          Esta nota apareció publicada en el diario El Nacional el 15 de enero de 2012