Martínez quiere sacarse la espinita

El infielder formó parte del equipo de Aragua que perdió la final de la Liga Paralela con La Guaira
 
José Gregorio Martínez es el único miembro del roster activo de los Tigres en la serie por el campeonato que formó parte de la filial aragüeña que perdió la final con La Guaira en la Liga Paralela. Así que el destino le otorga una nueva oportunidad de conseguir una corona contra Tiburones, sólo que en la LVBP.

“Es una revancha que tendría mayor significado”, dijo Martínez. “Sería bueno sacarse esa espinita de perder allá abajo. Porque cuando llegas a una final, en cualquier liga, aspiras a ganarla”.
El carabobeño apenas consumió un turno en la eliminatoria y durante la semifinal vio la mayor parte de los partidos desde el banco. Pasó todo el año en el Programa de Desarrollo esperando una oportunidad para ayudar al equipo grande. Hace un par de noches hizo realidad ese anhelo y respondió con dos carreras impulsadas, que fueron la clave para que Aragua ganara el tercer partido del Clásico de Enero e inclinara la balanza a su favor 2-1.
“Este dugout es mi segunda casa y estoy muy contento de luchar por el título con el resto de mis hermanos”, enfatizó.” Ramón (Castro) se lesionó y es una baja fuerte para el equipo. Estaba atravesando por un gran momento ofensivo y se encuentra muy triste. Nosotros sólo tratamos hacer lo posible para compensar esa ausencia”.
Castro, que se adueñó de la segunda base en diciembre y con sus batazos cargó al club durante la semifinal, sufrió una distención muscular en la pierna izquierda en el primer partido de la instancia decisiva y desde entonces no ha podido regresar. Yangervis Solarte y Martínez se han encargado de suplirlo.
“Deseo estar en el terreno todos los días y fue una emoción increíble cuando supe que estaba en la alineación (el jueves)”, destacó Martínez, de 26 años de edad.
 
Experiencia invaluable
 No es la primera vez que el infielder se encuentra en medio de una situación como esa. Debutó en la temporada 2005-2006 con los felinos, un año antes del tricampeonato. Se formó en medio de triunfos, con el club más exitoso en la historia del circuito y antes de la presente campaña había consumido 6 turnos en 2  finales (2006-2007 y 2010-2011) y aparecido en par de Series del Caribe (2006-2007 y 2007-2008), la última de ellas como regular.
Martínez  llegó a convertirse en uno de los principales suplentes del cuadro interior del conjunto maracayero y tal vez el momento más importante de su trayectoria fue anotar la carrera que culminó una reacción histórica de 8 anotaciones que dejó en el terreno al Magallanes y le dio el título a los Tigres en el quinto desafío de la final de 2007.
Pero una lesión en el labrum del hombro derecho en 2009 le obligó a ausentarse de los parques durante un año. Un percance que frenó su desarrollo.
“He tenido la suerte de estar en esos equipos y recibir la oportunidad de jugar. Regresé la temporada pasada y ahora estoy sano. Este año entendí que no había cupo para mí arriba y fui a trabajar duro en la Paralela para recuperar el tiempo perdido. Estaba enfocado en dejar buenos números y esperar a que me necesitaran. Por eso es tan especial ahora”.
Martínez ligó .361, el séptimo promedio más alto del Programa de Desarrollo, con .430 OPB y .526 de slugging, mientras que encabezó a la filial de los rayados en bases alcanzadas (70).
El manager Buddy Bailey, fiel a sus principios de nutrir a los Tigres con sus granjas, convocó al jugador de cuadro y bateador derecho en la postemporada.
“Tuvimos a varios jugadores en la Paralela que están en capacidad de ayudarnos como ‘Marty’”, señaló el veterano estratega.
“Estaré listo para cuando me necesiten. Ganarle a La Guaira tendrá un incentivo especial”, sonrió Martínez.
                                          Esta nota apareció publicada en el diario El Nacional el 28 de enero de 2012