Foto RAFAEL FLORES |
El Toro hizo un bullpen de 35 envíos y
aseguró que debutará en cualquier momento después del 20 de octubre
VALENCIA
Carlos Zambrano probó todo su repertorio ayer en una
sesión de bullpen de 35 envíos y aseguró que en dos semanas comenzará a “ayudar
a Magallanes”.
El Toro, acompañado por el coach de pitcheo Roberto
Espinoza, con la asistencia del instructor Ramón García, fue el primer pelotero
uniformado en el Estadio José Bernardo
Pérez, cinco horas antes del juego
inaugural.
“Tengo que trabajar un poco más el slider, pero eso
viene”, confesó el ex grandeliga, en su primera práctica con los Navegantes.
“El sinker, el pitcheo que siempre me ha ayudado a triunfar, lo sentí muy bien.
La recta caminó. Hice repeticiones de slider, recta de dedos separados y recta.
Me sentí muy bien”.
Zambrano estuvo entrenándose en la Universidad de
Miami y el lunes lanzó un juego simulado, antes de viajar de regreso a Venezuela
el miércoles.
“Estuvo muy suelto”, señaló Espinoza. “Me gustó
verlo hoy porque no es lo mismo sostener una conversación telefónica. Soltó
largo y luego hizo un buen bullpen. Ensayó todo su repertorio, tanto de frente
como de lado. Noté buen dominio del splitter y el sinker, que es su envío
natural”.
El derecho descansará hoy y mañana regresará al
montículo.
“Lanzará un juego simulado de un par de entradas,
entre 15 y 20 pitcheos máximo. Luego enfrentará a bateadores en una práctica,
de frente y de lado. Se tratará de una sesión de dos entradas y luego
aumentamos un inning más. Así que en dos semanas tendrán la oportunidad de ver
al Toro en la loma”, abundó Espinoza.
Zambrano no descarta tener una par de presentaciones
en el Programa de Desarrollo y adelantó una posible fecha de su estreno.
“Tal vez tenga hasta cinco partidos como designado
en la Paralela”, bromeó. “Sí. No estaría mal dos encuentros allá, para luego
debutar después del 20 (de octubre). Tal vez el 21 o 22”.
El primer Caracas-Magallanes de la temporada es el
martes 22 de octubre en Valencia.
“¿Contra los Leones? Vamos a ver, ya me asustaron”,
volvió a sonreír.
En busca de una oportunidad
Carlos Zambrano se rehabilitó con éxito después de sufrir una lesión en el hombro el 28 de junio, la última vez que lanzó para la sucursal triple A de los Filis.
“Fue una distensión en la parte lateral del hombro. Nunca había sentido una molestia como esa. No podía levantar el brazo. Pero luego de dos meses de descanso estoy bien. No fue algo grave”, enfatizó.
El percance evitó que Filadelfia lo subiera a principios de julio.
“Tenían una cláusula en mi contrato en la que debían subirme el 2 o 3 de julio o dejarme libre. El señor Rubén Amaro Jr. (gerente general de los cuáqueros) me dijo que me iban a subir como relevista y que cuando se abriera un cupo en la rotación sería mío. Pero me lastimé y debía someterme a un tratamiento entre dos y tres semanas. Mientras los días pasaban, el equipo fue perdiendo chance (de estar en los playoffs) y comenzó una reestructuración con el despido de Charlie Manuel. Fui a rehabilitarme en Clearwater (Florida) y luego me enviaron a casa para que estuviera cerca de mi familia y Filadelfia pagó todos los gastos. Amaro fue un profesional”.
Ahora, Zambrano esperará hasta después de la Serie Mundial para explorar el mercado con sus agentes.
“Veremos qué equipo estará interesado. Pero no creo que vaya a desperdiciar las oportunidades que tuve el año pasado, cuando Texas y Colorado me ofrecieron invitarme para ganarme un puesto (en diciembre). Les dije que no y pagué el precio por esa mala decisión. No pude jugar con ningún equipo en los primeros dos meses de la temporada”.
Esta nota apareció
publicada en el diario El Nacional el 11 de Octubre de 2013
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