domingo, 28 de agosto de 2011

Décimo Inning



Carlos González no ha tenido la temporada que esperaba. No ha podido exhibir la consistencia que mostró el año pasado cuando ganó el título de bateo de la Liga Nacional, aunque comienza a parecerse a aquel bateador.
Después de superar la lesión en la muñeca derecha que le sacó durante tres semanas del roster activo de los Rockies, CarGo está en medio de una importante racha ofensiva. Incluso antes de lastimarse y pese a su lento comienzo en abril, mes en el que apenas ligó .228 de promedio, sus números hasta el Juego de Estrellas no eran muy diferentes a lo que exhibió durante ese mismo periodo el año pasado, cuando compiló la mejor campaña de su carrera, y comenzaba a dar indicios de una mejoría.
Este año, cuando llegó al receso su línea ofensiva era de 292/.359/.491, por debajo de la que exhibió la zafra anterior, .314/.346/.532, pero no algo alarmante, sobre todo si comparamos el resto de sus estadísticas (17 jonrones, 56 anotadas, 60 empujadas y 12 robos, en 2010, por 13 cuadrangulares, 55 carreras, 51 impulsadas y 14 estafas, en 2011).
“No pienso en repetir lo del año pasado, no me pongo ese tipo de presiones”, dijo el marabino a través de un correo electrónico. “Estoy consciente de que este año no comenzó de la forma que quería, pero poco a poco me he ido recuperando y hasta ahora estoy contento con esta evolución”.
Esa “evolución” le augura otra buena cosecha al final de la campaña, de acuerdo con lo que ha estado haciendo en agosto. Ayer intentaba extender dos rachas. Hasta el viernes había conectado hits en 13 encuentros consecutivos, a tres de su tope personal, mientras que sumaba una cadena de 10 desafíos con al menos una producida, que empató el récord de la franquicia en manos de Vinny Castilla desde abril de 2004. En lo que va de mes, su OPS es un extraordinario 1.077, además suma nueve vuelacercas y 28 impulsadas, en 19 partidos. 
“La diferencia con relación a otros meses es que estoy saludable. Cuando entré en lista de lesionados, por la inflamación en la muñeca derecha, ya estaba a punto de alcanzar el máximo, tal como lo hice en julio de 2010”, destacó el jardinero.
Todo ha ocurrido después de regresar al tercer lugar de la alineación del manager Jim Tracy. Otro factor que, de acuerdo con el marabino, ha influido en el alza de su producción.
“Siempre me he sentido bien como tercer bate, es un puesto importante para el equipo y creo que desde que volví a este lugar del lineup he respondido bien y espero seguir así. Todo es cuestión de adaptarse y yo me adapto a lo que el equipo necesite”.   
El equipo también necesita que la ofensiva de CarGo tenga el mismo peso fuera del Coors Field. Durante las giras no ha sido el mismo a lo largo de su carrera en las Rocallosas.
El viernes, los Rockies iniciaron una serie en la carretera de nueve partidos, crucial en sus aspiraciones de acortar la ventaja que tienen los Cascabeles en la punta del oeste de la Nacional. Hace dos noches la única anotación de Colorado, en la derrota 6-1 contra los Dodgers, fue un cuadrangular del venezolano, pero en lo que va de campaña apenas golpea para .232/.303/.429, para un bajo OPS de .733 puntos, con nueve jonrones y 26 remolcadas, en 51 cotejos fuera de casa, contra .332/.404/.602, 15 jonrones, 58 empujadas y un OPS de 1.006, en 60 juegos en Colorado.
“Mi tarea es producir en todos los parques. La diferencia siempre existirá porque creo que a la mayoría nos va mejor en nuestra casa porque ahí es donde tenemos más juegos y nos apoya una gran fanaticada. Pero por supuesto que la meta es mejorar la producción en las giras”.
Hasta ahora, el ajuste más importante para el bateador zurdo ha sido, en su opinión, “recuperar la confianza en el plato”. Los Rockies tienen puestas sus esperanzas en esa confianza.

Esta nota columna publicada en el diario El Nacional el 28 de agosto de 2011

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