Batista piensa que Omar Vizquel debe llegar al Salón de la Fama |
El derecho quisqueyano piensa que los venezolanos
podrían terminar con la hegemonía de Japón en el evento
Miguel Batista ha estado activo durante 25 años en
el beisbol profesional y nunca desperdicia la oportunidad de hablar sobre
pasión. El martes apareció en el roster del equipo de República Dominicana que
enfrentó a Venezuela en el Juego de Estrellas de la LVBP y antes del partido,
rodeado de periodistas, se detuvo en un tema que ha llamado su atención como
analista en años recientes.
“Este país se ha convertido en uno de los mercados
internacionales más importantes para las grandes ligas. Ahora mismo su talento
está en el nivel más alto, comparable con cualquiera y cuidado si allí podemos
incluir a Estados Unidos”, dijo el derecho con 18 años de servicio en las
mayores, sólo superado por los 19 de Manny Ramírez entre los quisqueyanos
activos. “Si comparamos nuestras geografías, nosotros (en Dominicana)
producimos más peloteros, pero Venezuela está igualado con nosotros en la
producción de súper estrellas en Latinoamérica”.
Batista aseguró que ha seguido de cerca el
crecimiento de los criollos. “Jugué en contra de Robert Pérez hace como 20 años
y durante ese tiempo ha sido notable el crecimiento. Un lustro atrás podías
decir ‘Venezuela está cerca de nosotros’. Ahora aparece al lado”.
El choque de estrellas de ambas ligas, sirvió de
abrebocas al encuentro entre las dos potencias el próximo 7 de marzo, cuando
inicien su recorrido en el Grupo C del Clásico Mundial de Beisbol, que se
eliminará en Puerto Rico.
“Será un partido que levantará mucho entusiasmo”,
señaló el lanzador originario de Santo Domingo. “Venezuela no tiene el problema
de puertorriqueños y dominicanos con los lanzadores. En el primer Clásico
Mundial me acuerdo que después de Javier Vásquez no teníamos otros pitchers con
ese nivel. Escuché que Félix (Hernández) dijo que abrirá el primer partido
contra Dominicana y sería una bendición de Dios que dejaran pitchear a (Johan)
Santana. Aquí hay muy buenos brazos y ofensivamente pueden armar un trabuco. Es
algo emocionante. Pienso que para este torneo los orientales (Japón ganó las
dos primeras ediciones del evento) no se quedarán con la corona”.
El año pasado, los equipos de MLB firmaron a 394
jugadores dominicanos por 229 criollos,
pero en promedio se gastó más dinero en reclutar a los venezolanos ($ 127.299
por $ 117.796). La tendencia se mantuvo en 2012.
“Puerto Rico lamentablemente se ha quedado atrás. Ha
decaído muchísimo. Antes la mayoría de los cátchers eran puertorriqueños, ahora
todos provienen de Venezuela. Nosotros a cuántos tenemos, ¿Miguel Olivo y
Carlos Santana? Es increíble el talento que está saliendo de esta tierra. Sin
duda, la brecha entre ambos países se está cerrado”.
Amigos,
recuerdos y una historia
La visita de Miguel Batista al Estadio Universitario
le sirvió para recordar a varios de los venezolanos con los que hizo amistad a
lo largo de su carrera.
“Ugueth Urbina fue mi compañero de cuarto por cinco
años y lo primero que hice al llegar a Caracas fue tratar de comunicarme con
él. También recuerdo de esa época (con Montreal) a (Melchor) Pacheco. Con
Felipe Lira e Iván Arteaga, cuando era un primera base, también hice muy buena
amistad”.
Batista siguió muy de cerca la trayectoria de Omar
Vizquel y no ahorró elogios. “Cooperé para muchos de esos casi 3000 mil hits
que conectó”, bromeó. “Si hubiese sido por Vizquel no paso de ligas menores. No
le sacaba un out. Pasarán 100 años para ver a otro como él y estoy seguro que
será otro venezolano en el Salón de la Fama”.
Vizquel, que se retiró este año, maltrató a Batista
con promedio vitalicio de .417 (24-10 y 6 boletos).
“No siguió jugando porque no lo ponían con
regularidad en el lineup. Pero sus
habilidades están intactas”.
Batista, que tiene dos libros publicados, escribió
un blog para ESPN Deportes entre 2007 y 2010 y aseguró que una de las historias
más celebradas por sus seguidores fue sobre Marco Scutaro.
“Se trató de una gran sorpresa. Es el único jugador
que se me ha acercado para pedirme que contara su historia. Todo un honor”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario