miércoles, 19 de octubre de 2011

Adonis García se adapta para jugar a diario

Foto NELSON CASTRO
Adonis Cardona ha convencido con su juego agresivo



El versátil pelotero se ha impresionado en el jardín, la única posición disponible que tiene la nave para el cubano

Adonis García preferiría jugar en la segunda base, si el manager Carlos García le diera a escoger una posición para ubicarse en el campo. Pero la intermedia pertenece a José Altuve y el resto de las posiciones tienen nombre y apellido. Así que la única posibilidad de jugar a diario para el cubano se encuentra en el jardín izquierdo.
“No estoy acostumbrado totalmente. Toda mi vida he sido infielder, así que no diré que me siento cómodo, simplemente me entrego para ayudar al Magallanes. Si viene un batazo y creo que está a mi alcance hago todo lo posible para llegarle”.
Apenas en el segundo partido de la temporada, la ex figura de la selección cubana demostró con hechos de qué habla, cuando se refiere a entregarse. Un batazo del jardinero de las Águilas, Seth Bynum, conectado con fuerza ante un envío de Ronald Bay, en el quinto inning, parecía destinado a superar la barda izquierda del Luis Aparicio, pero cuando se encendía la celebración en el dugout de Zulia, García dio un salto y con su brazo del otro lado de la verja sacó la bola para evitar el jonrón y, tal vez, realizar la mejor atrapada en lo que va de campaña. Una entrada antes había decapitado un misil de Justin Henry, en el que tuvo que lanzarse de cabeza para asegurarlo en el guante.
“Supe que le iba a llegar, corrí y luego di un salto. Fue muy rápido, pero al ver el guante, tenía la pelota”, contó el jugador de cuadro convertido en patrullero, sobre el elevado de Bynum.
Lances como esos han llevado al piloto García a bautizarlo “Maravilloso”.
“Me ha dado un voto de confianza. Es un gran entrenador. Estoy muy agradecido de estar aquí y que me hayan inscrito desde el principio en el roster. Trabajé duro durante las prácticas para lograrlo y cuando me dieron la noticia, un día antes de la inauguración en Maracaibo, no pude dormir. Estaba muy ansioso y contento”, reveló García.
Con el madero amaneció ayer con hits en todos los encuentros de los Navegantes. Aunque al principio tuvo que controlar sus emociones. “No voy a negar que estaba muy nervioso. Se trata de mi debut en el profesional. En el primer turno apenas vi tres pitcheos y me ponché. Luego pude conectar un doble, pedí la pelota, y la presión bajó. Ahora deseo permanecer aquí, jugar todos los días”.
No hay razones para pensar que no pueda hacerlo.

Ajustes necesarios
Adonis García fue un consistente bateador en la Serie Nacional de Cuba y un productivo bate cuando se enfundó en el uniforme de la selección, pero su experiencia con Magallanes es totalmente diferente a lo que se ha enfrentado.
“Debo tomarme mi tiempo para mirar bien a los pitchers, estudiarlos. Ahora mismo, solo trato de hacer buenas conexiones. Seguir la bola en todo momento y no irme adelante con los pitcheos. Siempre estoy preocupado por la velocidad, en esta liga varios pitchers tiran duro y de muy buena calidad, tipos con años en el beisbol profesional. Ese es el principal ajuste que he hecho”.

Como en casa
Durante las prácticas del Magallanes, el mes pasado, al coach Gregorio Machado sentía curiosidad por el tiempo que tomaría Adonis García en adaptarse al país, a un ambiente descocido para él, luego de abandonar su Cuba natal.
Hasta ahora, García no ha tenido problemas para tranquilidad de Machado.
“Mejor no me ha podido ir con todos los compañeros y entrenadores. Siempre uno extraña su casa, su país, pero hasta ahora puedo decir que no lo he notado. Gracias a esa ayuda que he recibido, al bueno trato que me dan, he logrado sentirme cómodo en el terreno”.
El “Almirante” García ha sido muy importante durante ese proceso.
“Es una gran persona dentro y fuera del terreno. Tengo mucho que agradecerle. Al principio iba a ser el noveno importado, pero todos me apoyaron y estoy aquí. Ahora debo responder a esa confianza”.  

Esta nota, con algunas modificaciones para Décimo Inning, apareció publicada en el diario El Nacional el 19 de octubre de 2011


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