El estratega no pudo clasificar a Bravos, pero asegura que
el equipo cuenta con el talento para tener éxito y aspira a repetir en el cargo
Henry Blanco imaginó un debut diferente como manager en la
Liga Venezolana de Beisbol Profesional. En lugar de celebrar la clasificación
de Bravos jugará los últimos dos partidos de la ronda regular con su club como
el único eliminado en la 2014-2015.
“No era lo que quería, en cuanto a resultados, pero es un
privilegio, un honor estar aquí, porque con tantos pilotos buenos disponibles,
la gerencia me dio la oportunidad de dirigir”, señaló el novel estratega, antes
del encuentro del domingo en el Estadio Universitario. “Fue una gran
experiencia en lo personal. Apenas dejé de jugar el año pasado con estos
muchachos y ahora estoy al frente del equipo. Fue un gran aprendizaje, sobre
todo en las relaciones, en cómo tratarlos desde otro rol. Creo que todos
mejoramos poco a poco, a medida que avanzaba la temporada. Solo resta seguir
aprendiendo”.
Margarita no logra avanzar a la semifinal desde la temporada
2010-2011, cuando terminó quinto con récord de 31-30. Desde entonces se ha
quedado en el camino en cuatro campañas consecutivas y durante ese lapso tiene
balance de 94-154, el peor de la LVBP, con un tope de 25 triunfos en la
2011-2012. Pero Blanco tiene razones para ser optimista.
“El equipo luce diferente”, aseguró el ex receptor, de 43
años de edad. “Sin pitcheo en esta liga no se puede hacer nada y, obviamente,
tuvimos problemas con los abridores y los relevistas intermedios en los
primeros dos meses de la campaña. Cerca de diciembre pudimos conseguir las
piezas que estábamos buscando, pero llegaron un poquito tarde”.
Los insulares amanecieron hoy con balance de 8-10 en el
último mes del calendario regular y la efectividad de sus brazos (3.91) es la
mejor entre los ocho equipos. En tanto que la ofensiva liga para .277, con 17
jonrones y 101 carreras anotadas, la cuarta cifra más elevada del circuito en
ese período.
“Si logramos tener un equipo como el que pudimos reunir en
este último mes, al inicio de la próxima temporada las cosas serán diferente.
Tenemos que mejorar el pitcheo y el club será más competitivo”, destacó.
Si Bravos logra barrer la doble tanda que jugará esta tarde
frente a los Tigres de Aragua, en el Stadium Nueva Esparta, Blanco y sus
dirigidos lograrán finalizar en .500 en las últimas cuatro semanas de
competencia. Tal vez sea un aliciente de cara al futuro inmediato, pese al
decepcionante resultado final.
“Tenemos las piezas. Omar Poveda (3-3, 2.89 Efe) fue de gran
ayuda, lamentablemente no pudimos contactarlo para que estuviera desde el
principio de la temporada. Todos sabemos lo que puede hacer. También contamos
con Omar Bencomo (3-2, 5.30 Efe). Muchas piezas han hecho su aporte. Solo
tenemos que juntarlas desde el arranque”, insistió Blanco, que espira a estar
de vuelta en la zafra 2015-2016.
“Claro que sí. Aunque todavía la gerencia no me ha dicho
nada, pero me gustaría volver. Pese a no lograr la clasificación, el equipo
hizo un gran esfuerzo. Me quedo con eso”.
Esta nota apareció publicada en LVBP.com el 29 de Diciembre
de 2014
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