Mitch Lively: “Es el primer premio que gano en mi carrera”

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Lively es el tercera lanzador del Magallanes que gana el Carrao Bracho

El as del Magallanes se llevó el Pitcher del Año de manera unánime, aunque aseguró que vino a Venezuela para trabajar duro y a los Navegantes sin pensar en galardones

VALENCIA

Mitch Lively era el único pelotero del Magallanes en el terreno del José Bernardo Pérez a las tres menos cuarto de la tarde. El derecho trotaba, cerca de la raya del jardín izquierdo, acompañado de su iPod.

“Sí. Ya lo sé. Soy el Pitcher del Año en la eliminatoria y el peor de los playoffs”, bromeó, después de concluir su ejercicio.

Horas antes, la Liga Venezolana de Beisbol Profesional había anunciado que el derecho de los Navegantes era el flamante ganador del Carrao Bracho con la unanimidad de los 45 votantes de los medios que participaron en la escogencia.

“Se siente muy bien cuando escuchas eso. Nunca antes había ganado un premio en mi carrera, ni siquiera en la Universidad”, volvió a sonreír. “Trabajé duro durante la ronda eliminatoria. Pero eso está en el pasado. Ahora nos encontramos en la semifinal, tratando llegar a la Serie del Caribe”.

Para llegar a enero, el californiano de 28 años de edad, se convirtió en el as de la nave y en el mejor lanzador del circuito, en un año dominado por los bateadores.

Lively lideró a sus colegas en triunfos (6), efectividad (1.70), WHIP (1.25) y  average de los oponentes (.215), mientras que terminaba sexto en ponches (41).

“Ha sido una gran experiencia. Lo recordaré por siempre”, destacó el importado, que se convirtió apenas en el tercer miembro del Magallanes que alza el trofeo, desde que fue instaurado hace 28 años, detrás de Juan Carlos Pulido (1993-94) y Jean Machí (2009-2010). “Es un gran logro para mí y para el equipo. Sólo traté de ayudar a sumar triunfos y que llegáramos a esta etapa”.

La temporada anterior, Lively reforzó a Bravos de Margarita y se despidió con récord de 0-2 y un terrible promedio de 7.71 carreras limpias en 9.1 entradas, repartidas en 12 relevos.

“Fue una apuesta de Magallanes”, enfatizó Luis Blasini, gerente deportivo, que no se dejó llevar por el mediocre desempeño del derecho. Lo vimos varias veces en Estados Unidos y como abridor se mostró mucho más dominante que en el rol de apagafuegos. Se merece el reconocimiento que recibió”. 

Lively esperaba tener una buena campaña. Era agente libre y pensaba que volver al país le ayudaría a conseguir trabajo. Sus metas eran modestas, no muy diferentes a las de la mayoría de los extranjeros que firman un contrato para jugar durante el invierno.

“De ninguna manera espera algo así. Quizás lanzar 10 juegos y luego irme a casa, relajarme y esperar que llegara el spring training. Nunca pasó por mi mente lograr todo eso y regresar en enero para seguir. Esta es una gran organización y estoy feliz de estar aquí”, señaló Lively, que aspira a ser el mismo lanzador que dominó la eliminatoria.

Luego de descansar durante un mes y regresar, el Pitcher del Año no ha sido el mismo. En sus dos aperturas del round robin exhibe balance de 0-1, con una efectividad 6.48 en apenas 8.1 actos. 

“Este año hice la transición de relevista a abridor y nunca antes había trabajado tantas entradas. Necesitaba ese mes para descansar. Así que no creo que haya influido en mi actuación. Simplemente, he estado detrás de los bateadores y no he tirado strikes. Antes logré ser más agresivo y los strikes uno y dos llegaban muy fácil. Espero volver a donde estaba en mi próxima salida”.

Esa apertura será la penúltima. Antes de viajar definitivamente.

“Debo ganarme un puesto en la primavera (con los Gigantes). Ese es el plan. Aunque me gustaría volver la próxima campaña”.

El alto mando valenciano intentará convencerlo para que se quede, como cuando pactó su regreso después de concluido su contrato inicial.

“Trataremos de retenerlo para que nos ayude con una o dos salidas durante una eventual final, pero tenemos que esperar a ver cómo se van dando las cosas”, indicó Giuseppe Palmisano, presidente del club.

“No lo sé. De verdad que no lo sé”, insistió Lilvely y volvió a mostrar una sonrisa, antes de retomar sus rutinas en la práctica.

Esta nota apareció publicada en el diario El Nacional el 10 de Enero de 2014