Ronny Cedeño se siente en familia

Cedeño asiste a su quinta final en la LVBP
pero por primera vez viste un uniforme diferente al de los Tigres

La figura de los Tigres de Aragua fue tomado por el Magallanes como sustituto para la semifinal y ahora piensa en un nuevo campeonato

PUERTO LA CRUZ

Ronny Cedeño no tarda mucho en recordar lo que considera el mejor momento de las cinco finales en las que ha participado.

“La remontada en el quinto juego de la serie, cuando anotamos ocho carreras en el noveno inning para ganar el título (con Aragua). Es una de las memorias que atesoro en mi carrera”.

Fue el 28 de enero de 2007. Magallanes ganaba 10-3 en el último capítulo. Aquella aciaga noche para los Navegantes todavía hace que algunos peloteros y técnicos arruguen el entrecejo.

Antes, en el primer partido, Géremi González protagonizó un altercado con Cedeño, que propició la expulsión del as filibustero en la segunda entrada. Lo que, tal vez, cambió el destino del Clásico de Enero y encaminó a los Tigres al primer cetro de su tricampeonato y a la consolidación de su dinastía.

Siete años después, Cedeño viste los colores del Magallanes, convertido en figura de un club que inició como favorito el tope contra Caribes de Anzoátegui por la copa de la LVBP.

“Ahora soy parte de ellos y trato de disfrutar el momento como refuerzo”, sonríe Cedeño, que se unió a los bucaneros en la semifinal, como una de sus sustituciones. “Es muy especial estar de nuevo tratando de ganar un título. Es un orgullo y una experiencia más que te ayuda a madurar como pelotero”.

Cedeño, que tuvo una participación previa con Magallanes en el round robin de la 2009-2010, asegura que se ha integrado al grupo como nunca antes.

“Conozco a la mayoría de los peloteros y me siento parte de la familia que han creado. Agradezco la confianza que depositaron en mí al escogerme y por eso pongo todo mi esfuerzo en el terreno”, destaca el carabobeño, originario de Puerto Cabello, que no solo ha aportado su excelsa defensa en las paradas cortas, sino una de las mejores ofensiva de la postemporada, que le llevó a ligar .415 de promedio, con 3 jonrones y 15 remolcadas, en la semifinal. Un rendimiento que ha sostenido en la instancia definitoria del torneo.

“Simplemente vine a ponerle corazón y a sentirme en confianza con mis compañeros. Nunca planeas que vas a batear de esa manera. Tratas de hacer la labor que te encomendaron”.

Aunque Cedeño piensa que usar los zapatos de Robinson Chirinos de alguna manera influyó en su producción.

“Robinson me prestó sus spikes porque en el equipo no querían usara los que llevé todo el año con los Tigres. Eso me hizo sentir bien”.

El calzado de Chirinos es azul y lleva grabado su número 28. Cedeño luce el 5 en la espalda.

“Ronny es como un hermano dentro del beisbol. Muchas personas no saben que nos conocemos desde los 14 años, cuando tratábamos de firmar con los Cachorros de Chicago”, explica Chirinos, otra de las figura de la nave. “Es una buena persona. Fácil de estar alrededor de él y que se ha podido compenetrar con el buen grupo que tenemos aquí. Así que darle los zapatos fue una manera de integrarlo todavía más”.

Si funcionó la primera vez, por qué no seguir usando los ganchos de Chirinos. 

“No tenía zapatos azules y a Ronny le gusta andar combinado (risas). Ese día no estaba jugando y me preguntó si podía usar mis zapatos. Le dije que no había problema y así lo hemos venido haciendo”, refiere Chirinos. “Decidió un partido y, bueno, Ronny cree en esas cosas. Yo en lo personal pienso que es una simple casualidad. Creo que lo que está haciendo es porque se preparó. Tuvo una buena campaña y eso se reflejó en el round robin. No fue por los zapatos. Es un tremendo pelotero”.

El manager Carlos García comparte el mismo concepto. “Es un profesional y se comporta como tal. Todos los refuerzos lo han hecho”.

Cedeño es parco al hablar, pero en el terreno de juego es elocuente con su rendimiento.

“Me entusiasma estar tan cerca de otro campeonato”, vuelve a sonreír.

ElDatoRonny Cedeño asiste a su quinta final en la LVBP, tantas como Juan Carlos Gutiérrez. En esta versión de Magallanes, solo Endy Chávez, que suma nueve series por el campeonato, los supera.