viernes, 12 de abril de 2013

Héctor Rondón aprendió a valorar al bullpen

Rondón convenció a Chicago con una sólida primavera

El derecho nunca pensó que llegaría a las mayores como relevista. Chicago y el draft de la regla 5 lo permitieron

Héctor Rondón asegura que disfruta cada vez que sube al montículo como relevista. La adrenalina fluye y se deja llevar. Debe enfrentar situaciones de apremio y en poco tiempo conjurar amenazas.
Ese papel le era extraño hasta hace poco tiempo, pero logró llevarlo a las mayores con los Cachorros y en las dos primeras semanas de la temporada no ha desentonado.
"La clave ha sido salir de los innings rápido, sin importar si consigo corredores o no en circulación. Tengo que mantener el partido en la línea para darle oportunidad de ganar al equipo. Me gusta relevar y la presión que genera. Es como si siempre lo hubiese hecho. Tienes que atacar a los bateadores, minimizar los errores. Cuando eres un abridor son otros los tiempos. Sabes con antelación a quién vas a enfrentar y si en una entrada te va mal, puedes recuperarte en otra. Como relevista no. Es un reto. Debes terminar lo que otros empezaron", explicó por teléfono desde Chicago.
El derecho, de 25 años de edad, fue considerado un prospecto élite en el sistema de Cleveland, futuro miembro de la rotación del equipo, pero su carrera dio un vuelco cuando debió someterse a una operación Tommy John en 2010 y al año siguiente sufrió fractura en el codo, cerca del área de la conexión del nuevo tendón, que le envió otra vez al quirófano.
"Mi sueño era llegar a las mayores con los Indios porque ellos me dieron la oportunidad de firmar. Quería hacerlo como abridor, pero no se pudo. Ahora estoy aquí y me gusta lo que hago".
Luego de las dos intervenciones quirúrgicas, entendió que ir al bullpen bajaría el estrés sobre el brazo y le ayudaría a aprovechar todo su potencial en pocas entradas por salida.
Chicago, un equipo en reestructuración, decidió tomarlo en el draft de la regla 5 en diciembre y probarlo en los entrenamientos.
"Sabía que Cleveland no me iba a proteger (en el roster de 40). Por eso decidí lanzar con los Leones y completar la transición a relevista allá. Me sorprendió que me tomaran los Cachorros, pero ellos saben que todavía soy joven y que puedo ayudarlos".
Rondón dejó efectividad de 1.80 (2 CL en 10 INN) en el spring training y el manager Dale Sveum le dio la noticia.
"Estábamos en Arizona, en medio de un partido de exhibición, y me llamó aparte para felicitarme y decirme que había hecho el equipo. Fue una gran noticia, pero la tomé con calma. Creo que no supe realmente lo que estaba ocurriendo hasta el día de mi debut (3 de abril). Sentí una gran emoción y mis primeros cuatro pitcheos fueron malos. Traté de calmarme y comenzar a ejecutar. (El catcher Welington) Castillo me dijo que lanzara strikes, que no pensara en nada más. Que buscara la mascota. Fue lo que hice".
De allí en adelante, tiró 3.2 entradas en blanco, repartidas 4 salidas, y podría convertirse apenas en el cuarto pitcher de los oseznos que en la última década que comienza su carrera con al menos 5 capítulos sin permitir anotaciones.
"No he pensado en eso", admitió. "Estoy satisfecho con la velocidad de mis envíos (recta de 91-92 millas por hora) y con los pitcheos rompientes (slider), además de la manera como estoy dominando el cutter (recta cortada), un pitcheo que logré perfeccionar con Caracas. El resto es hacer el trabajo, ser consistente y mantenerme saludable".

Esta nota apareció publicada en el diario El Nacional el 11 de abril de 2013

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