Décimo Inning

El valenciano está en su mejor campaña en ligas menores

César Hernández, el prospecto de la segunda base de los Filis de Filadelfia, toca las puertas de las grandes ligas

César Hernández está comenzando a despertar el interés que una vez gozó Freddy Galvis, antes que Filadelfia lo promoviera a las grandes ligas.

El prospecto se encuentra en medio de un arranque de temporada que podría terminar en su mejor cosecha en el sistema de granjas de los Filis, justo en el último año del millonario contrato que firmó el segunda base Chase Utley en 2007.

¿Estará listo para asumir el reto? Hernández todavía necesita trabajar en su consistencia, algo fundamental para cualquier jugador en desarrollo, pero su ofensiva lo puede colocar en el canal rápido de la autopista que lo lleve del Coca Cola Park, donde viste el uniforme del Lehigh Valley, al Citizens Bank Park.

En las oficinas cuáqueras apuestan a su potencial, pero lo llevarán con cuidado, sin apresurar las cosas. El sábado, cuando Utley fue colocado en lista de lesionados por 15 días, el equipo subió al dominicano Michael Martínez, que batea a las dos manos como el venezolano, pero que puede jugar varias posiciones y tiene 324 turnos de experiencia arriba, en las últimas dos campañas.

"Freddy (Galvis) estaría por encima de él, así que no tenía mucho sentido subirlo", explicó a MLB.com Scott Proefrock, asistente a la gerencia general. "No es tan versátil como Michael. En este momento, (Hernández) está mucho más limitado a la intermedia, al menos en el juego diario".

Hernández no ha estado ajeno a los comentarios que se hacen sobre su promisorio futuro a corto plazo. Tal vez en un par de años se una a Galvis para fabricar los dobleplays del club.

"Estoy muy contento", suelta el valenciano, de 23 años de edad, al otro lado del teléfono. "He trabajado duro para estar en esa posición. Sólo tengo que esperar los resultados en el terreno. Lo demás no está en mis manos".

Las decisiones las toman en la oficina en el momento adecuado. Pero se hacen más fáciles cuando el pelotero responde a las expectativas.

Antes de la jornada de ayer, Hernández ligaba .317/.383/.444 en 180 turnos en la Liga Internacional, con 16 juegos de dos o más hits.

"He logrado hacer los ajustes", asegura. "El año pasado apenas jugué un mes en triple A y me costó batear (.248/.270/.298). Pero esa experiencia me ayudó a conocer mejor la zona de strike de los lanzadores y a identificar los envíos rompientes.

Cuando estás en doble A o ligas de menor clasificación, el pitcheo tiene un mismo nivel. Aquí no. Te enfrentas a lanzadores con mucha experiencia, algunos de ellos grandeligas".

"Está tomando buenos turnos", comentó recientemente Benny Looper, director de personal de los Filis a Baseball América. "No sabemos cómo lucirá el equipo el próximo año, así que es muy importante lo que pueda hacer en esta campaña".

Hernández no es un bateador comparable con Utley. Suma dos jonrones en su cuenta este año, la mitad de su tope personal impuesto en 2011, aunque uno de esos turnos de los que habla Looper llamó la atención de los scouts, como ejemplo de su potencial.

El 5 de mayo contra el veterano de Pittsburgh, Francisco Liriano, que estaba rehabilitándose con el Indianápolis, logró hacer ajustes de un turno a otro y sacar la bola. 

"Liriano lo ponchó con ese envío en su primera vez al bate. Luego trató de hacer lo mismo en la siguiente oportunidad y sólo vio el humo de la pelota", recordó Joe Jordan, director de desarrollo de peloteros de los Filis, en una entrevista con el Inquirer . "Está comenzando a reconocer como lo atacan los pitchers y por eso está bateando de esa manera".

La clave para Hernández, asegura un scout de la Liga Nacional, es que crea en su capacidad para llegar y "poner todas sus herramientas en función de eso. Su bate, velocidad en las bases, capacidad para robar, paciencia para embasarse y buena defensa".

"Sí. No puedo descuidarme. Trabajo día a día para subir y jugar a diario", dice el prospecto, sin dejar un resquicio a la duda.

Esta columna apareció publicada en el diario El Nacional el 27 de mayo de 2013