Tras siete campañas en ligas menores, el ex receptor se ha transformado en un confiable cerrador con el Huntsville. El derecho recibe elogios en las granjas de Milwaukee
Jesús
Sánchez ha tenido que corregir el curso de su carrera en tres ocasiones para no
perder el rumbo en su objetivo de llegar a las grandes ligas.
El
valenciano, de 24 años de edad, fue firmado originalmente como catcher por los
Yanquis en 2005 y en su primera campaña como profesional (2006) fue incluido en
el grupo de prospectos que Nueva York envió a Filadelfia, por el jardinero Bob
Abreu.
Luego de dos
campañas con pocos resultados a la ofensiva, Sánchez hizo la transición al
montículo a finales de 2008 y su actuación fue tan buena como abridor que en
2009 que fue protegido por los Filis y apareció entre los primeros 30
prospectos de la organización.
Desde
entonces lidió con problemas de inconsistencia que le llevaron a perder su
estatus con los cuáqueros y tras ser sacado del roster, firmó como agente libre
con Milwaukee. En 2011 tampoco le fue bien como iniciador en la Liga del Sur (4-7,
4.91 Efe.). Así que en los entrenamientos de primavera volvió a justarse y está
en medio de lo que podría ser la mejor zafra de su carrera.
“Tuve
problemas para ir largo en los partidos y ahora estoy a tiempo completo como
relevista. Creo que encontré la manera de sacar mejor provecho a mi repertorio”,
contó el derecho al otro lado del teléfono. “Me siento más cómodo tirando uno o
dos innings por salida porque puedo usar todo mi arsenal, sin limitarme. El año
pasado la velocidad de mi recta cayó a 89-90. Ahora ha estado constante en 95 y
la han medido en 96-97”.
En su
segunda temporada con el Huntsville Stars (AA) descubrió que tiene madera para
transformarse en un sólido cerrador. Al menos es lo que ha demostrado hasta
ahora.
Sánchez
inició la eliminatoria como taponero intermedio y preparador del cerrojo Robert
Wooten, que a principios de mayo fue subido al Nashville (AAA) y le heredó su
responsabilidad al venezolano.
“Comencé
mi carrera como receptor y jugaba a diario. Cuando eres pitcher abridor lo
haces cada cinco días. No es lo mismo. Me gusta que fluya la adrenalina, estar
en situaciones apretadas en los partidos, con presión. Eso me hace funcionar
mejor”.
En mayo,
Sánchez prácticamente fue imbateable. Dejó 0.56 de efectividad en 16.1 innings,
convirtió las 4 oportunidades que tuvo de salvar, ganó un partido y los
contrarios le ligaron un anémico .170. Ponchó a 19 por 5 boletos y el 67 % de
sus envíos cayó en strike.
“La
velocidad de la recta me ha ayudado a que mis pitcheo quebrados sean mucho más
efectivos. Soy un pitcher de poder y cuando mezclo el slider y el cambio puedo
sacar de paso a los bateadores y conseguir ponches”.
Esa
actuación lo llevó a ser uno de los cinco miembros del Stars, junto con Hunter Morris, Scooter Gennett, Evan Anundsen
y Tyler Thornburg, seleccionados para el Jugo de Estrellas de la Liga del Sur,
que se realizó el 19 de junio.
“Todos
se lo merecen”, dijo el manager Darnell Coles, al Huntsville Times, antes del
encuentro estelar. “Pero Sánchez ha estado fenomenal. Es nuestro mejor relevista
(…) Siempre ataca al bateador. No está con rodeos. Se trata de lo mejor que
tiene contra el rival”.
Fue
la primera aparición de Sánchez en un All-Star. “Nunca había estado en esa situación porque mis comienzos
siempre eran flojos. Uno nunca se plantea ir al Juego de Estrellas. Sólo tratas
de hacer tu trabajo y ayudar al equipo. Pero cuando te dan la noticia es muy
grato. Disfruté la experiencia al máximo”.
Antes
de la jornada de ayer, Sánchez marchaba con 11 salvados en 12 chances, una
cifra sólo superada por Bruce Rondón (20), prospecto de Detroit, entre los
venezolanos en ligas menores. Hasta el viernes, su promedio de carreras limpias
era de 1.59, mientras que sumaba 41 abanicados en 45.1 entradas.
“Me
esfuerzo para
llegar a las mayores con Milwaukee o con cualquier otro equipo. Siempre hay
scouts observándote. Pero no me distraigo pensando en eso. Debo mantener la
concentración y el enfoque en lo que hago”.
Esta vez
la senda que escogió para seguir su camino hacia el horizonte cercano, parece
la indicada.
El slider, pitcheo clave
Desde la
segunda mitad de la campaña anterior, Sánchez comenzó a usar más el slider que
la curva. “Me dijeron que me ayudaría más como relevista. Por eso cuando fui a
Venezuela a jugar con Magallanes trabajé en ese pitcheo y estoy viendo los
resultados. Ahora me recomendaron agregar otro, el splitter. Lo he estado intentando.
Pero es algo que no será inmediato. Si se desarrolla como un envío plus está
bien, si es average no tendría sentido. Nunca trato de hacer más de lo que
puedo. Me repertorio es lo suficientemente bueno como para sacar outs. Sólo
dejo que las cosas fluyan”.
Relevistas con más salvados en
las menores*
Lanzador Nivel G P EFE J JS WHIP
Bruce Rondón A+/AA 1 0 1.59 27 20 0.81
Jesús Sánchez AA 3
2 1.59
32 11
1.04
José Flores A+ 1
2 2.43
27 10
1.28
Jean Machí AAA 1 1
3.58 31 7 1.41
Eduardo Sánchez AAA
0 2 6.08
14 6
1.65
*Hasta 29/06/12
Esta
nota apareció publicada en el diario El Nacional el 1° de julio de 2012
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