domingo, 4 de septiembre de 2011

José Altuve trazó un vertiginoso ascenso


José Altuve fue el protagonista de una gran historia que lo llevó a las grandes ligas

El camarero debutó en grandes ligas tras iniciar en clase A. El sistema de granjas de las mayores está cerca de cerrar la temporada de 2011. Es tiempo de hacer una evaluación de los peloteros más destacados del país


José Altuve había jugado en 127 encuentros, hasta el viernes, entre las granjas de los Astros y las mayores. La mayor cantidad en su carrera, una cuenta que aumentará en lo que resta de temporada regular para Houston. Algo impensable hace siete meses, al menos para algunos analistas.
El maracayero fue noticia en los entrenamientos de primavera ­a los que asistió como invitado de los siderales­ por su estatura. Venía de una sólida temporada el año anterior en las filiales y comenzaba a despertar el interés de los incrédulos, sobre todo después de ratificar sus progresos con Magallanes durante el invierno.
Pero no era uno de los principales prospectos de los Astros y en todos los scouting reports que destacaban las cualidades del segunda base, aparecía su 1,66 metros de altura como un asterisco. "Tendrán que pasar muchas cosas para que llegue a las grandes ligas", comentó un cazatalentos este año.
Ciertamente una serie de factores se juntaron para que su ascenso dejara de ser una mera especulación, pero Altuve se encargó de ser ese catalizador para acelerar el proceso. Después de ser asignado al Lancaster (A+), de la Liga de California, él mismo escribió un guión del que era protagonista y que terminó con su ópera prima. Su historia es la más destacada entre los casi 900 peloteros que iniciaron 2011 en el beisbol organizado.
En 213 turnos ligó .408. Fue ascendido al Corpus Christi (AA) y golpeó .361, con nueve dobles, cinco jonrones y 25 empujadas, en 35 encuentros y 144 veces al bate. A mediados de campaña representó a Houston en el Juego de Estrellas del Futuro, partido en el que consiguió dos imparables, incluido un doble. Dejó promedio combinado de .389 --cuando los Astros lo promovieron al equipo grande el 20 de julio-- que todavía sigue siendo el más alto en todas las ligas menores ¿La clave? "Jugar cada encuentro como si fuera el último", dijo, sin dudar.
Sí. Pasaron muchas cosas. En julio ya los Astros no tenían nada que buscar en el centro de la Liga Nacional y Jeff Keppinger fue cambiado a San Francisco, dejando vacante la segunda base. Pero Altuve, con su gran año, se convirtió en la alternativa ideal para llenar ese vacío. Ahora, es la cara visible del futuro de la organización.
"Hace dos años lo vimos bastante en los entrenamientos de primavera", comentó el manager Brad Mills al Houston Chronicle. "No tuvo tanta exposición, pero sabíamos el tipo de habilidades que tenía, el tipo de energía que trae al terreno a diario, el tipo de pasión que tiene por el juego".
Hasta ahora se adaptado con éxito a las exigencias de las grandes ligas y su línea de producción es de .305/.321/.403.

Otros debuts y buenas actuaciones
Salvador Pérez
Hasta el viernes otros 14 peloteros venezolanos se unieron a Altuve como debutantes en la gran carpa: Brayan Villarreal (Tigres), Eduardo Sánchez (Cardenales), Alexi Amarista (Ángeles), Ezequiel Carrera (Indios), José Yépez (Marineros), Léster Oliveros (Tigres, cambiado a Mellizos), Héctor Sánchez (Gigantes), Robinson Chirinos (Rays), Alex Torres (Rays), Manuel Piña (Reales), Henderson Álvarez (Azulejos), Salvador Pérez (Reales), Jesús Montero (Yanquis) y Eduardo Escobar (Medias Blancas).
Álvarez, de 21 años de edad, participó en las últimas dos ediciones del Juego de Estrellas del Futuro y exhibía efectividad de 3.18 y relación de 70 ponches por 18 boletos, en 96.1 innings, distribuidos entre clase A avanzada y doble A, antes de ser promovido.
A Pérez (.290, 10 jonrones y 53 producidas, entre AA y AAA) Kansas City le encargó la titularidad de receptoría, mientras que a Montero (.288, 18 Jrs, 67 CI, en AAA), primer prospecto de Nueva York y tercero de todo el beisbol, ya hizo su debut arriba. Carrera (.287/.371/.348) todavía aparece como segundo en bases robadas de la Liga Internacional (AAA), con 35.
Héctor Sánchez (.283, 12 Jrs, 81 CI, entre A y AAA) se ganó su ascenso gracias a sus batazos y buena defensa en las filiales de los Gigantes.

Técnicos exitosos
Cuatro managers venezolanos guiaron a sus escuadras a la postemporada.
Carlos Mendoza, que debutó al frente de la filial de los Yanquis en la Liga de la Costa del Golfo se llevó el título, mientras que Carlos Subero (AA), Carlos García (A+) y José Miguel Nieves (Novatos), compraron boletos a los playoffs.
Carlos García
"Desde el principio, ha sido un gran año para nosotros", dijo Mendoza a MiLB.com, después derrotar en la final al equipo de los Marlins de Florida. "Tenemos un gran grupo de jóvenes, con una gran química".
Los Yanquis terminaron en la cima de la división norte del circuito con registro de 37-23 (.617).
Subero, en su segundo año con el Chatanooga, granja de los Dodgers en la Liga del Sur, dejó récord de 7562, en la división norte de la reunión, y disputará la semifinal.
García, que también se estrenó como piloto en 2011, llevó al Bradenton al mejor registro de la división sur en la Liga del Estado Florida (42-23). "Cuando me entrevistaron para el trabajo, le comenté a los jefes de Pittsburgh, que era posible desarrollar a los muchachos ganando. Cada quien ha hecho su trabajo y cumplimos", comentó el "Almirante", vía telefónica.
Nieves, en su primer año en Estados Unidos, después de dirigir en la Venezuelan Summer League, señaló el camino para que la filial de los Rojos ganara el comodín en la Liga de Arizona (3125), pero cayó en la primera ronda de playoffs.

Las mejores herramientas
A mediados de agosto, Baseball America publicó los resultados de una encuesta realizada entre managers y coaches de ligas menores para establecer cuáles eran los peloteros con las herramientas más eficientes en el sistema de granjas de ligas menores. El selecto grupo incluyó a varios miembros de la delegación nacional.
En clase A, el derecho Néstor Molina (Dunedin/Toronto) fue catalogado como el lanzador de mejor control en la Liga del Estado de Florida.
En ese mismo circuito, a César Hernández (Clearwater/ Filadelfia) lo señalaron como el mejor segunda base defensivo. En la Liga de Carolina, Sandy León (Potomac/Washington) reunió la mayoría de los votos como la mejor mascota.
Henderson Álvarez
En la Liga del Medio Oeste, Dixon Machado (West Michigan/Detroit) exhibió el mejor brazo de un infielder y la mejor defensa en el campocorto. En la Liga del Sur del Atlántico, nadie juzgó mejor la zona de strike que el jardinero Ramón Flores (Charleston/ Yanquis).
En doble A, el lanzador Henderson Álvarez (New Hampshire/Toronto) exhibió la mejor recta y Francisco Martínez (Erie/Detroit) la defensiva más excelsa en la antesala, en la Liga del Este.
En triple A, destacaron dos jardineros en la Liga Internacional. Ezequiel Carrera (Columbus/Cleveland) fue el mejor corriendo las bases y el de guante más seguro en el outfield, mientras que Gorkys Hernández (Indianápolis/Pittsburgh) fue seleccionado como el de mejor brazo.

Talento en ascenso
Néstor Molina
Néstor Molina aparece en el All Star de la Liga del Estado de Florida, gracias a una sensacional relación de ponches (115) y boletos (14), en 108.1 innings, repartidos en 21 salidas con el Dunedin (Toronto), en las que dejó balance 10-2, con 2.58 de efectividad. Luego de ser ascendido a la Liga del Este (AA), exhibe foja de 2-0, con un minúsculo 0.47 promedio de carrera, más 29 abanicados por apenas dos pasaportes, en 19 entradas. "En la organización piensan que Molina estará en las mayores el próximo año", aseguró Rafael Moncada, Scouts de los canadienses, responsable de la firma del derecho.
Oscar Hernández
Oscar Hernández ganó el MVP de la Venezuelan Summer League con los Rays, tras erigirse en campeón bate (.402), jonronero (21) y remolcador (66), imponiendo marcas históricas en todos esos departamentos, apenas en su segundo año en el circuito y primero como titular detrás del plato. A sus números agregó el liderato en hits (96), porcentaje de embasado (.503) sluggig (.732) y OPS (1.236). "Lo que hizo con el bate es notable, pero no estamos hablando únicamente de un buen bateador. Es el paquete completo", advirtió Carlos Alfonso, director de operaciones internacionales de Tampa Bay. Hernández dirigió al segundo mejor staff de pitcheo de la reunión veraniega que terminó con 3.62 de efectividad, casi media carrera menos que el promedio de la liga, mientras que retiraba al 42% de los hombres que le salieron al robo (33 de 79).
Yender Caramo es un derecho que lideró la Dominican Summer League en victorias (103) y efectividad (1.20), lanzando para los Reales. "Su recta está entre 94-95 mph, buen cambio, curva y slider. Esta entre los candidatos a Pitcher del Año de la organización", dijo Richard Castro, scout de Kansas City.
José Campos
José Campos encabezó la Liga del Noroeste en efectividad (2.32) y ponches (85), lanzando para el Everett (A-). En 81.1 innings, el derecho apenas regaló 13 boletos, mientras que dejaba marca de 5-5, en 14 aperturas. "Es un lanzador con mucha proyección para seguir subiendo en nuestro sistema de granjas. Su recta ha llegado a tocar las 100 mph. Mucho talento", destacó Emilio Carrasquel, scout de Seattle.
Elevys González
Elevys González, que puede pararse a ambos lados del plato, está peleando el título de bateo de la Liga del Estado de Florida y fue el antesalista del All Star del circuito. "Se convirtió en una de las claves para el equipo (Bradenton). Hace mucho contacto y es bueno con el guante", dijo su manager Carlos García. González exhibe una línea de .318/.372/.457, con 35 dobles, 6 triples, 5 jonrones y 79 producidas, en 124 desafíos.
Jesús Aguilar
Jesús Aguilar fue promovido del Lake County (A-) al Kinston (A+) por Cleveland, luego de batear .292, con 19 jonrones y 69 impulsadas además de .915 de OPS. Hizo progresos significantes en el plato y la primera base y se colocó en el mapa de los prospectos de la organización. En la temporada ya suma 23 cuadrangulares.
Ernesto Mejía ya no puede considerarse un prospecto, pero con el Mississippi, filial de los Bravos en la Liga del Sur (AA), tiene una línea .294/.376/.514, con 23 jonrones, 36 dobles, un triple y 92 remolcadas, tope entre los nativos.


Esta nota apareció publicada en el diario El Nacional el 4 de septiembre de 2011

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